Puntos clave:
- Los/as líderes financieros/as de La Iglesia Metodista Unida se reunieron para reducir la propuesta de presupuesto que presentarán a la Conferencia General el próximo año.
- Incluso con estas tensiones, las juntas tanto de la Mesa Conexional como del Concilio General de Finanzas y Administración pudieron acordar mutuamente cómo dividir los fondos reducidos.
- La última reducción viene con nuevas pérdidas proyectadas para la base financiera de la denominación, debido al cierre de iglesias y desafiliaciones.
- Al mismo tiempo, los/as líderes señalaron que la gran mayoría de las congregaciones se mantienen en el redil metodista unido y que los esfuerzos de revitalización ya han comenzado.
La Iglesia Metodista Unida se verá y operará de manera muy diferente en el futuro. Ese fue el estribillo más oído en la reunión del 17 al 19 de mayo en la que los/as líderes financieros/as de la denominación redujeron la propuesta históricamente más baja del presupuesto denominacional, a raíz de nuevas pérdidas proyectadas por la desafiliación y el cierre de iglesias. Los-as líderes también escucharon comentarios sobre la reducción del número de obispos/as metodistas unidos/as.
Sin embargo, incluso mientras lamentaban las partidas, los/as líderes también discutieron las oportunidades de La Iglesia Metodista Unida (IMU) para revitalizar y compartir el amor de Dios con renovado vigor. “Pensar en la misión y el ministerio mientras se trata de garantizar la administración en los años venideros es un equilibrio delicado, y a esto hemos dedicado horas porque cada uno/a de nosotros/as se preocupa profundamente por La IMU” dijo el Rev. Moses Kumar, alto ejecutivo del Concilio General de Finanzas y Administración (GCFA por sus siglas en inglés) de la denominación, dirigiéndose a los/as asistentes a la reunión de las juntas directivas de la agencia financiera y de la Mesa Conexional, un organismo de liderazgo que coordina los ministerios y recursos denominacionales.
¿Qué hay en el presupuesto?
Las conferencias de Estados Unidos distribuyen sus aportes entre siete fondos generales de la iglesia. Cada fondo apoya una categoría diferente de ministerio: obispos/as, educación ministerial, administración general, Fondo para Colegios Universitarios Negros, Universidad de África, trabajo ecuménico y Fondo de Servicio Mundial, que apoya el trabajo de la mayoría de las agencias generales.
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La junta del GCFA ahora está proponiendo un presupuesto denominacional 2025-2028 de aproximadamente $370,5 millones para la Conferencia General del próximo año, la principal asamblea de formulación de políticas de la denominación. Eso es alrededor de $3 millones menos que el presupuesto en el que la agencia financiera comenzó a trabajar el otoño pasado.
El nuevo resultado final también marca una reducción de casi el 40% del presupuesto de toda la denominación que la Conferencia General aprobó en su última reunión ordinaria en 2016.
La propuesta plantea recortes significativos a todos los fondos que apoyan los ministerios de toda la denominación, incluidas las agencias generales y los/as obispos/as metodistas unidos/as. También será el presupuesto más bajo que se presente ante la Conferencia General desde 1984, cuando la denominación internacional tenía muchos menos miembros en el continente africano y aún tenía que establecer la Universidad de África, ahora financiada con fondos denominacionales.
Descubrir cómo manejar reducciones tan pronunciadas y mantener un ministerio vital en todo el mundo ha sido una fuente de tensión entre los/as directores/as del GCFA y de la Mesa Conexional; sin embargo, después de meses de negociaciones, el 18 de mayo ambos grupos aprobaron por unanimidad recomendaciones sobre cómo dividir un presupuesto mucho más pequeño.
“Hemos tenido algunos desacuerdos con el GCFA, y estamos felices de terminar con un espíritu de acuerdo sobre estos números” dijo Dave Nuckols, tesorero de la Mesa Conexional, al presentar las asignaciones presupuestarias recomendadas por el organismo de liderazgo.
No obstante, agregó que esperaba que las conversaciones pudieran continuar para restaurar el proceso presupuestario colaborativo que las dos juntas habían usado previamente en el desarrollo de las recomendaciones presupuestarias que se presentan a la Conferencia General. Tanto la junta del GCFA como la de la Mesa Conexional habían acordado hace mucho tiempo, que el presupuesto de toda la denominación debe reducirse significativamente, pero diferían en cuanto a qué tan bajo llegar mientras seguían manteniendo ministerios en todos los niveles de la denominación.
En La IMU las iglesias locales brindan una parte de las ofrendas que reciben, denominados aportes, a las conferencias anuales, organismos regionales de la iglesia que, a su vez, pagan aportes a los ministerios generales de la iglesia.
Cuidado con las estafas
En medio del número creciente de desafiliaciones, el Concilio General de Finanzas y Administración ha notado un aumento en las estafas de transferencias electrónicas que buscan sacar provecho de la situación.
Las iglesias que se desafilian de la denominación y se quedan con su propiedad deben pagar varias tarifas de salida a sus conferencias. La agencia financiera advierte a las iglesias desafiliadas que tengan cuidado con estafadores/as que buscan desviar esos pagos, y también insta a las conferencias a compartir el siguiente mensaje con sus congregaciones: “Si recibe un aviso de que nuestra información de pago ha cambiado, debe comunicarse de inmediato por teléfono con la conferencia para verificar la llamada, pues no planeamos hacer ningún cambio a lo largo de este proceso”.
Estados Unidos proporciona la mayor parte de los fondos para los ministerios de toda la denominación utilizando, para determinar los aportes a una conferencia anual, la fórmula en la que el total de los gastos netos de la iglesia local se multiplican por un porcentaje base aprobado por la Conferencia General.
Las juntas del GCFA y de la Mesa Conexional estaban en desacuerdo acerca de cuánto disminuir el porcentaje base propuesto a la Conferencia General, pues inicialmente la junta del GCFA apoyó reducirlo en 25% en noviembre, mientras que la Mesa Conexional apoyó una reducción del porcentaje base del 18%. Finalmente, la junta del GCFA decidió reducir la tasa base en un 22,9%.
La caída continua en la propuesta de presupuesto, incluso con un porcentaje base ligeramente más alto, es el resultado del lado del gasto neto de los registros contables, siendo los gastos netos lo que gasta una iglesia después de los gastos de capital, los aportes y las donaciones benéficas. Básicamente, son un indicador de la base financiera de la denominación.
En 2021, las conferencias anuales en Estados Unidos experimentaron una reducción general del 7% en los gastos netos de las iglesias debido en parte a la desafiliación de iglesias, pero especialmente al cierre de iglesias en medio de la pandemia del COVID-19. Con esa caída en mente, la agencia financiera ha ajustado a la baja sus proyecciones sobre los gastos netos, y es probable que este año vea el pico de desafiliación de iglesias bajo una ley eclesiástica que permite que las congregaciones se vayan con sus propiedades si cumplen con ciertas condiciones. Esa ley expirará a fines de 2023.
Hasta el momento, las conferencias anuales han aprobado más de 3.580 desafiliaciones, lo que representa una pérdida de casi el 12% de las congregaciones en Estados Unidos desde que la ley de la iglesia entró en vigencia en 2019. Dicho de otra manera: la mayoría de las iglesias metodistas unidas en los Estados Unidos parecen permanecer en el redil.
Tampoco está claro cuánta pérdida de membresía representarán estas desafiliaciones, ya que algunos/as miembros de las congregaciones que salen están optando por seguir siendo metodistas unidos/as transfiriendo su membresía a otras iglesias o plantando nuevas comunidades de fe metodistas unidas.
Aún así, los/as obispos/as de la denominación, el personal de la agencia y otros/as líderes de la iglesia ya se están adaptando a la nueva realidad pues desde antes de la pandemia, las agencias generales de la denominación han estado presupuestando cada año teniendo en cuenta la baja en las ofrendas.
Los/as obispos/as también están tratando de apuntalar al prolongadamente inestable Fondo Episcopal, el fondo respaldado por aportes que permiten su trabajo.
Durante su reunión en Nashville, las juntas tanto de la Mesa Conexional como del GCFA escucharon al Obispo Thomas J. Bickerton presidente del Concilio de Obispos/as, quien instó a los/as líderes a incluir a los/as obispos/as en las discusiones sobre la reducción en el número de obispos/as, y agregó que ya está en conversaciones con otros/as líderes denominacionales sobre la cantidad de obispos/as necesarios/as. “No creo que haya nadie que quiera preservar el episcopado en su forma actual ya que los números hablan por sí mismos" concluyó.
El presupuesto propuesto para 2025-2028 asigna $68,82 millones al Fondo Episcopal, lo que representa una reducción del 25,2% del presupuesto de la Conferencia General aprobado en 2016.
En la actualidad, La IMU tiene 59 obispos/as activos/as: 39 en los Estados Unidos, 13 en África, 4 en Europa y 3 en Filipinas, siendo 7 obispos/as estadounidenses menos que el presupuesto anterior aprobado por la Conferencia General.
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Sin embargo, Rick King, director financiero del GCFA advirtió a los/as líderes que con este presupuesto, el Fondo Episcopal correrá el riesgo de quedarse sin dinero si La IMU vuelve a tener una lista completa de obispos/as. Bickerton dijo que él y sus colegas episcopales reconocen este desafío y mencionó que 5 obispos/as de Estados Unidos se enfrentan a la jubilación obligatoria en 2024, y que otros/as 2 o 3 también pueden jubilarse, mientras que para el 2028 16 obispos/as de Estados Unidos se enfrentan a la jubilación obligatoria. También agregó que los/as líderes de las jurisdicciones, quienes eligen a los/as obispos/as de Estados Unidos, ya están considerando cómo abordar futuras elecciones.
Dijo que entre 2024 y 2028 los/as líderes denominacionales deberán pensar estratégicamente sobre dónde los/as obispos/as pueden servir mejor y dónde son más necesarios/as. La simple eliminación de obispos/as de áreas en Estados Unidos con un alto número de desafiliaciones puede ser contraproducente para llegar al nuevo campo misionero.
Mientras tanto, toda el Área Episcopal de Eurasia se ha embarcado en el proceso de varios pasos para abandonar La Iglesia Metodista Unida, y no hay planes para elegir otro/a obispo/a en esa región.
Al mismo tiempo, líderes de la iglesia han estado trabajando durante mucho tiempo en un plan para agregar 5 obispos/as a África. Bickerton dijo que sus colegas africanos/as son realistas sobre los desafíos financieros que enfrenta ahora la denominación. “Mi oración es que podamos encontrar una manera de colaborar y elaborar estrategias juntos/as para llegar al mismo objetivo que todos/as deseamos, que es posicionar a la iglesia para hacer discípulos/as y tener un impacto en el mundo” concluyó Bickerton.
El Obispo Mande Muyombo, presidente de la Mesa Conexional se hizo eco de los sentimientos de Bickerton y en una reflexión que abrió la reunión el 18 de mayo, reconoció que las finanzas de la iglesia no se tratan solo de números sino de vidas transformadas. “Ese es el poder de La IMU, una iglesia que ha dado esperanza a algunos/as de nosotros/as, nos ha llevado de un lugar de escasez y desesperanza a un lugar donde experimentamos el amor y la gracia de Dios. Señor, sé que hablo en nombre de muchos/as, no solo en mi continente de África sino en el mundo” oró Muyombo, quien dirige el Área Norte de Katanga, que abarca partes del Congo y Tanzania.
* Hahn es asistente al editor de noticias para Noticias MU. La puede llamar al (615) 742-5470 o escribirle a newsdesk@umcom.org. Para leer más noticias metodistas unidas, ideas e inspiración para el ministerio suscríbase gratis al UMCOMtigo.
** Leonor Yanez es traductora independiente. Puede escribirle a IMU Hispana-Latina @umcom.org
