Puntos Clave:
- Delegados a la Conferencia General votaron para eliminar la política de desafiliación de la iglesia del Libro de Disciplina.
- Solicitaron a las conferencias anuales establecer una política de reafiliación para las iglesias que quieran regresar.
- También aprobaron la última de las peticiones de regionalización.
El enfoque de La Iglesia Metodista Unida (IMU) en la desafiliación ha llegado a su fin y apenas comienza un nuevo impulso para la regionalización. Por una votación de 516 a 203, los/as delegados/as a la Conferencia General apoyaron el fin de una política de desafiliación agregada por la Conferencia General especial de 2019 y utilizada por aproximadamente una cuarta parte de las iglesias estadounidenses para abandonar La IMU.
“La temporada de desafiliaciones termina hoy” dijo Lonnie Chafin, delegado de la Conferencia Anual del Norte de Illinois y presidente del comité legislativo de la Conferencia. El comité apoyó y llevó a la sala la petición que elimina el Párrafo 2553 del Libro de Disciplina, que solo apareció en un anexo digital a la Disciplina.
“Aprobar esta petición significará que el Párrafo 2553 nunca aparecerá en una edición impresa del Libro de Disciplina, y enviará un mensaje a nuestras congregaciones de que es hora de hablar sobre cómo unirnos y compartir el amor de Dios" dijo a sus compañeros/as delegados/as.
Durante la misma sesión de la tarde, los/as delegados/as aprobaron por 629 votos contra 96 una política de reafiliación para dar la bienvenida a las iglesias que deseen reincorporarse a La IMU, y también adoptaron por 593 votos contra 139 la última de las peticiones de regionalización destinadas a dar a las regiones de la iglesia la misma posición en la toma de decisiones.
Pero cada propuesta generó debate pues antes de la Conferencia General, los grupos de defensa teológicamente conservadores Buenas Noticias, Asociación del Pacto Wesleyano y la Iniciativa Africana anunciaron su intención de abogar porque se extienda y expanda la desafiliación. Los grupos también se opusieron a la regionalización.
Sin embargo, a diferencia de la Conferencia General especial de 2019, estos grupos no vieron prevalecer sus objetivos legislativos.
Eliminando la desafiliación
La Conferencia General especial de 2019 adoptó el Párrafo 2553 que permitía a las congregaciones desafiliarse de la denominación y quedarse con sus propiedades “por razones de conciencia” relacionadas con la homosexualidad, si cumplían con ciertos requisitos procesales y financieros.
Básicamente, la ley eclesiástica ofrecía una forma limitada para que las congregaciones pudieran liberarse de la centenaria cláusula de fideicomiso de La Iglesia Metodista Unida, que establece que la propiedad de la iglesia se mantiene en fideicomiso para beneficio de toda la denominación.
Debido a las acciones tomadas por la Conferencia General especial de 2019, el Párrafo 2553 solo se aplicó en los Estados Unidos, pero algunas partes de Europa usaron su autoridad bajo la constitución de la denominación para adaptar la Disciplina y permitir que las congregaciones se fueran.
Bajo la política de desafiliación que expiró a finales del año pasado, más de 7.600 iglesias estadounidenses se desafiliaron.
Pero, como señaló Chafin al presentar la eliminación de la política, las conversaciones de las congregaciones sobre si quedarse o irse fueron a menudo polémicas y desgarradoras: "Las congregaciones han estado en conflicto y han tenido que desviar la atención de nuestra misión al dedicar mucho tiempo y energía a las desafiliaciones”.
Las salidas se aceleraron con el lanzamiento en 2022 de la Iglesia Metodista Global, una denominación teológicamente conservadora formada con el apoyo de Buenas Noticias y la Asociación del Pacto Wesleyano. La mayoría de las iglesias que abandonaron el redil metodista unido eran teológicamente conservadoras. Muchos argumentaron que era justo que la política de desafiliación se extendiera a África.
Sin embargo, el Rev. Guy Nyembo de la Conferencia de Katanga del Norte en el Congo dijo a través de un intérprete que muchos/as metodistas unidos/as africanos/as quieren seguir siendo parte de la denominación que los/as crió a ellos/as y a sus antepasados.
“Quiero decir que estamos en contra de la desafiliación de La IMU” dijo y añadió: “Por favor, no inflijan dolor a nuestras iglesias”.
Dixie Brewster, delegada de la Conferencia Anual de las Grandes Llanuras, habló de su temor de que las iglesias preocupadas por los cambios aprobados por la Conferencia General, queden atrapadas.
“Hablo a favor de la desafiliación y estoy muy nerviosa porque quiero un lugar para que nuestras iglesias conservadoras con valores tradicionales tengan una manera de avanzar pacíficamente. No quiero que queden atrapadas en nuestro sistema judicial” dijo.
Dando la bienvenida nuevamente a las iglesias
Mucho menos controvertida fue la política que invitaba a las iglesias a reafiliarse. “Con un espíritu de gracia, damos la bienvenida a aquellas iglesias que se han desafiliado o retirado para que se reincorporen a La IMU. Cuando corresponda, cada conferencia anual tendrá una política de reafiliación para las iglesias que buscan regresar a la conexión” dice la política recién adoptada.
Los/as delegados/as modificaron la petición para exigir que las iglesias que regresan afirmen su compromiso con la cláusula de confianza de la denominación.
“Creo que debemos dejar la puerta abierta, y este movimiento para llevar nuestra iglesia a un lugar nuevo nunca ha consistido en pedirle a la gente que se vaya” dijo Helen Ryde, delegada de la Conferencia Anual del Oeste de Carolina del Norte y organizadora del grupo de defensa Red de Ministerios de Reconciliación.
Regionalización
Durante los últimos tres días, los/as delegados/as aprobaron las últimas tres peticiones de Regionalización Mundial que tienen como objetivo poner a las diferentes regiones geográficas de la denominación en igualdad de condiciones.
Según la legislación, Estados Unidos y cada conferencia central, regiones eclesiásticas en África, Europa y Filipinas se convertirían en conferencias regionales con la misma autoridad para adaptar el Libro de Disciplina, el libro de políticas de la denominación, para lograr una mayor eficacia misional.
En la actualidad, solo las conferencias centrales tienen esa autoridad según la constitución de la denominación, para adaptar la Disciplina según lo requieran las necesidades misionales y los diferentes contextos legales.
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Gran parte de la regionalización incluyendo el permitir la creación de una conferencia regional en Estados Unidos, que la Conferencia General aprobó el 30 de abril, depende de la ratificación de una enmienda constitucional. La ratificación requiere que un total de al menos dos tercios de los/as votantes de la conferencia anual apoyen la enmienda. La Conferencia General ya aprobó esa enmienda el 25 de abril con el 78% de los votos. Ahora, dependerá de los/as votantes de la conferencia anual si el plan de regionalización llega a buen término.
El proceso de ratificación por parte de las conferencias anuales de las enmiendas constitucionales en esta petición comenzará a más tardar 30 días después del levantamiento de la pospuesta Conferencia General de 2020, lo que significa que las conferencias anuales de Estados Unidos podrían comenzar a votar sobre las enmiendas en junio, y es probable que el Concilio de Obispos/as anuncie los resultados de la votación a finales del próximo año.
Pero la petición debatida el 1 de mayo entrará en vigor independientemente de si se ratifica o no la enmienda constitucional.
Se crea un comité legislativo en la Conferencia General que se ocuparía únicamente de asuntos estadounidenses, similar al Comité Permanente sobre Asuntos de la Conferencia Central. Cualquier tema aprobado por el comité tendría que presentarse ante la plenaria de la Conferencia General. Si se ratifica la regionalización, la legislación que crea el comité caducará.
El Rev. Jerry Kulah, delegado de Liberia y líder de la Iniciativa Africana, dijo que la regionalización es "inaceptable”: “No se puede pretender ser una Iglesia Metodista Unida cuando se compartimenta”.
Uchena Awa, delegado de la Conferencia Anual de Nueva Inglaterra, dijo que Estados Unidos debería tener el mismo nivel de autonomía que disfrutan las conferencias centrales africanas.
El Rev. Dee Stickley-Miner, delegado de la Conferencia Anual del Oeste de Ohio y miembro del comité permanente, anticipa que la regionalización en última instancia fortalecerá la conexión de la denominación. “Nos permitirá comprometernos a confiar unos/as en otros/as y darnos libertad sin tratar de imponernos unos/as a otros/as. Es una manera de poder vivir la gracia de Jesucristo” dijo a Noticias MU.
* Hahn es asistente al editor de noticias para Noticias MU. La puede llamar al (615) 742-5470 o escribirle a newsdesk@umcom.org. Para leer más noticias metodistas unidas, ideas e inspiración para el ministerio suscríbase gratis al UMCOMtigo.
** Leonor Yanez es traductora independiente. Puede escribirle a IMU Hispana-Latina @umcom.org
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