La Conferencia Anual Ampliada de Nueva Jersey obtuvo buenas críticas en su primera reunión virtual, y algunos/as clérigos y laicos/as sugirieron que estar en línea podría ser el camino a seguir incluso cuando la pandemia haya terminado. “Nuestra primera conferencia anual virtual se desarrolló increíblemente sin problemas, y se cumplió de manera efectiva el objetivo de proporcionar una sesión atractiva e interactiva mientras se mantienen las pautas por el COVID-19" dijo la Revda. Shelley Smith, secretaria de la conferencia.
Pero en la Conferencia Anual de Virginia, problemas técnicos con la votación obligaron a la Obispa Sharma Lewis a cancelar al mediodía una reunión virtual el 19 de septiembre, que había estado activa toda la mañana con 2.200 votantes; la conferencia volverá a intentarlo el 31 de octubre.
"Cuando la tecnología funciona, es maravilloso, pero cuando no lo hace, es horrible" dijo Lewis por teléfono.
La Revda. Shelley Smith habla durante la reunión virtual de la Conferencia Anual Ampliada de Nueva Jersey, celebrada del 5 al 6 de octubre. Smith, secretaria de la conferencia, dijo que el primer esfuerzo de la conferencia para que el clero y los/as miembros laicos/as se reúnan en línea fue "increíblemente fluido". Foto de Shari DeAngelo Studios, cortesía de la Conferencia Anual Ampliada de Nueva Jersey.
Así como las iglesias tuvieron que luchar para conectarse o mejorar su presencia en línea debido a las restricciones de reuniones causadas por el COVID-19, casi todas las conferencias anuales de los Estados Unidos han tenido que recurrir a reuniones virtuales para aprobar presupuestos y manejar otros asuntos esenciales. Los enfoques han variado al igual que las experiencias, con sentimientos encontrados que acompañan incluso a las sesiones exitosas.
El Obispo Bruce Ough ha presidido más de 28 conferencias anuales y siente que las dos conferencias virtuales que dirigió este año, en las conferencias anuales de Dakotas y Minnesota, fueron bastante bien, lo que ha sido secundado por las encuestas de los/as participantes. “Sin embargo, la desventaja, que también ha surgido en las evaluaciones, es que la gente claramente extraña la conexión física y la construcción de comunidad que ocurre en los bordes” dijo.
Las conferencias anuales son los cuerpos básicos de la Iglesia Metodista Unida (IMU), como se describe en su constitución; pero el término "conferencia anual" también se refiere a las reuniones anuales de esos grupos, que incluyen sesiones de negocios, sesiones para clérigos y laicos/as, servicios de ordenación y comisión, servicios conmemorativos y más.
En los Estados Unidos las sesiones de la conferencia anual generalmente ocurren entre mayo y julio, pero la pandemia obligó al cierre de las iglesias a partir de marzo, y rápidamente siguieron los aplazamientos de las conferencias anuales. También lo hicieron los anuncios de que se volverían virtuales.
Este año, tales reuniones se han extendido por todo el calendario, con la reunión de la Conferencia Anual de Great Plains el 30 de mayo y la Conferencia Anual de Kentucky no programada para reunirse hasta el 6 y 8 de diciembre. La mayoría de las conferencias han limitado sus agendas y han acortado sus reunions, hacienda mayor énfasis en la música y los informes pregrabados. Las conferencias han utilizado una variedad de plataformas de comunicación, siendo Zoom Video Webinar la opción popular. También han variado las tecnologías de votación.
"Muchos de los comentarios que hemos recibido se referían a la facilidad con la que pudimos pasar de elementos pregrabados a elementos en vivo" dijo Ough.
Una presencia común fue el Ministerio de Medios GNTV, dirigido por el Rev. David Wood, un presbítero metodista unido. Esa organización sin fines de lucro generalmente brinda apoyo técnico a 16 reuniones de conferencias anuales en los Estados Unidos, y este año, con la tecnología más crucial, ese número fue de 24. “Los desafíos son asegurarnos de permitir espacio para la participación de los/as miembros para que todos/as puedan hacer sus preguntas y hacer oír su voz” dijo Wood.
Si bien la mayoría de las conferencias en línea han tenido un punto focal, donde el/la obispo/a preside y se origina una transmisión en vivo, la Conferencia Anual de Virginia Occidental llevó a cabo su sesión de negocios en 12 sitios. A cada uno acudieron pequeños grupos de clérigos y laicos/as, observando el distanciamiento social y viendo la transmisión por una pantalla grande.
La Obispa Sandra Steiner Ball, con un protector facial, estaba en el lugar donde se originó la transmisión en vivo, y se la podía ver en la pantalla en los demás; pero además de su liderazgo virtual, cada sitio tenía su propio presidente para la discusión y votación local.
Que el clero y el laicado participaran desde sus hogares no habría funcionado universalmente en la montañosa y en gran parte rural de Virginia Occidental.
“Tenemos vastas áreas en la conferencia que tienen desafíos con el acceso a Internet”, dijo la Revda. Deborah Coble, directora de comunicaciones. Hasta ahora, la Conferencia Anual de Virginia ha tenido los problemas tecnológicos más notorios y ha publicado cartas de disculpa de Lewis y del proveedor responsable de las fallas en la votación. Pero Virginia no ha estado sola, pues la Conferencia Anual de Great Plains en su reunión del 30 de mayo tuvo una teleconferencia masiva donde los problemas de conexión fueron inicialmente lo suficientemente graves como para considerar posponerlos, dijo Scott Brewer, tesorero y director de servicios administrativos.
La Conferencia Anual de Río Texas escogió ElectionBuddy como su tecnología para la votación segura en línea, y el sistema funcionó. Sin embargo, algunos/as participantes no obtuvieron sus credenciales de voto debido a una base de datos de direcciones de correo electrónico de la conferencia no completamente actualizada. Entonces, para incluirlos/as a todos/as, la conferencia se trasladó durante la reunión del 3 de octubre a la votación por Zoom, lo que el Obispo Robert Schnase reconoció que, dadas las circunstancias, era esencialmente un sistema de honor.
Jozlin Parker, director de ministerios técnicos de Rio Texas, señaló que los pocos votos que se tomaron tuvieron márgenes de aprobación de al menos el 97%, y que la conferencia pudo comparar los números de inscripción y votación para saber que “el sistema de honor estaba funcionando para esta votación de la conferencia anual".
La Conferencia Anual del Alto New York ha criticado abiertamente cómo manejó el debate en su sesión virtual del 3 de octubre.
“Si quisiera hablar con algo, tendría que llamar a un número de teléfono, ingresar un código de acceso, presionar un botón para ser transferido al/la operador/a, hablar con el/ella y decirle que me gustaría hablar a favor o en contra de esta medida o si tenemos una cuestión de orden, entonces el/la operador/a nos pondría en una fila para que el/la obispo/a nos llamara”, dijo Ian Urriola, delegado laico, quien señaló que los retrasos hicieron que no se llamara a todos/as y que había problemas de audio y subtítulos. Ha pedido al Concilio Judicial de la denominación que se pronuncie sobre si la reunión violó el Libro de Disciplina, que requiere accesibilidad para personas con discapacidades, en este caso, personas sordas o con problemas de audición.
La Obispa LaTrelle Easterling dirige la Conferencia Anual de Baltimore-Washington en una celebración de ordenación y comisionamiento al aire libre, socialmente distanciada y transmitida en vivo. La pandemia ha forzado ajustes en las sesiones de conferencias anuales en los Estados Unidos y este servicio del 12 de septiembre, celebrado en Fulton, Maryland, fue parte del movimiento de Baltimore-Washington para reunirse virtualmente. Foto de Tony Richards Photography, cortesía de la Conferencia Anual de Baltimore-Washington.
Mientras tanto, Kevin Nelson, un misionero local que participó en la reunión, sigue descontento porque la moción organizativa de la conferencia no permitió enmendar la legislación. "Si no podemos cambiar el asunto que nos ha traído, hemos sacrificado un poder central de un cuerpo deliberativo" dijo.
El Obispo Mark J. Webb de la Conferencia Anual del Alto Nueva York, rechazó una solicitud de entrevista. Stephen J. Hustedt, director de comunicaciones, señaló que el obispo “pidió gracia” cuando comenzó la reunión. “Ciertamente fue una experiencia de aprendizaje tanto para los/as usuarios/as como para las personas que ejecutan la tecnología y en general, hubo muy pocos contratiempos. Dicho esto, para las personas que experimentan problemas con la comunicación, sé que fue frustrante" dijo Hustedt.
Muchos/as de los/as participantes en la conexión informaron experiencias positivas con conferencias anuales virtuales. “Todos/as se sintieron realmente bien al respecto”, dijo el Rev.Bill Lawson, consultor técnico y audiovisual de la Conferencia Anual de Memphis, que contó con la participación de 600 clérigos y laicos/as a través de Zoom y otros/as 2.500 que transmitieron los procedimientos a través de Facebook o YouTube.
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Lawson estaba entusiasmado con el método de votación basado en el sitio web utilizado en su conferencia. "Era incluso mucho mejor que los dispositivos de votación portátiles que habíamos usado antes, y con resultados más rápidos" dijo.
Algunos/as metodistas unidos/as dijeron que aprecian el ahorro de tiempo y costos de no tener que viajar a la conferencia anual; y las conferencias anuales también vieron disminución en sus gastos.
“Para nuestra conferencia anual virtual de 2020, gastamos $92.000, que fue solo el 35% de nuestro presupuesto de $265.000 (conferencia anual)”, dijo la Revda. Carol Bruse, tesorera de la Conferencia Anual de Texas.
Algunas conferencias tuvieron una experiencia lo suficientemente buena como para comenzar a apuntar hacia reuniones virtuales posteriores a la pandemia.
"Espero que las Dakotas y Minnesota, junto con muchas otras conferencias anuales en los Estados Unidos busquen modelos híbridos o pasar de una conferencia anual virtual un año a una conferencia en persona y un evento de enseñanza el próximo" dijo Ough.
Se habla en la denominación sobre si las conferencias anuales virtuales podrían presagiar una Conferencia General virtual de 2021, si no se ha desarrollado y distribuido una vacuna a nivel mundial a tiempo para esa reunión a fines de agosto y principios de septiembre del próximo año.
Ough y Wood están entre quienes piensan que incluso con desafíos de idioma y zona horaria, se podría realizar una Conferencia General virtual.
"Tendrías que entrenar para estar preparado/a y creo que es completamente posible" dijo Wood. Pero existe un sentimiento universal entre el pueblo metodista unido acerca de reunirse en línea, y es que no es lo mismo a estar juntos, dijo Wood.
Jason Moore, consultor de conferencias anuales a través de su firma Midnight Oil Productions, publicó una consulta en Facebook, preguntando a sus amigos/as metodistas unidos/as sobre sus experiencias con las sesiones virtuales de la conferencia anual. Casi 100 personas respondieron. “A la mayoría de la gente le gustó la eficiencia, pero todos/as extrañaron la conexión personal" dijo.
* Hodges reporta para Noticias MU y está radicado en Dallas. Lo puede llamar al (615) 742-5470 o escribirle a newsdesk@umcom.org. Para leer más noticias metodistas unidas, ideas e inspiración para el ministerio suscríbase gratis al UMCOMtigo.
** Leonor Yanez es traductora independiente. Puede escribirle a IMU_Hispana-Latina @umcom.org
