Todas las personas que viven en las Residencias Lucille Raines han luchado contra la adicción, pero están haciendo todo lo posible para dejar eso atrás. Lo que ayer fue un antiguo hotel en Indianápolis, hoy ofrece una atmósfera de apoyo similar a la de un dormitorio.
Algunos dicen que la religión debe mantenerse separada de la política. Otros sienten que la iglesia está llamada a abogar por la misericordia y la justicia.
Virginia Occidental tiene una de las tasas más altas en la nación de niños/as reasignados/as a familias temporales debido al abuso de drogas, y una de las tasas más bajas de hogares sustitutos disponibles.