Ofrezco esta reflexión con la confianza de que pueda aclarar mi posición como discípulo y líder, dar ánimo y esperanza donde haya cansancio, y ser un fiel desafío para todos los que buscamos seguir a Cristo en esta época.
El pueblo metodista unido, en sus reuniones regionales anuales, hablaron de muchas cosas, pero los debates más apasionados giraron en torno al tema de la sexualidad humana.