La reunión de la tarde fue para el clero de la Conferencia Anual de Kentucky, cuando alrededor de 200 personas se reunieron en la capilla de Lexington Centenary UMC; mientras que otras 200 personas asistieron a la reunión vespertina celebrada en el espacioso santuario de la iglesia.
El evento de la WCA no estuvo afiliado a la Conferencia Anual de Kentucky, y el 21 de marzo se llevará a cabo en la Universidad del Estado de Kentucky una reunión patrocinada por UMCNext de Kentucky (una organización centrista), Ministerios de Reconciliación de Kentucky (una organización progresista), Union College y la IMU Highland. Esta reunión tampoco tiene conexión con la Conferencia Anual.
Los reverendos Keith Boyette y Walter Fenton, presidente y vicepresidente de la WCA respectivamente, hablaron en ambas reuniones del jueves y cubrieron esencialmente la misma información sobre la historia y la filosofía de la WCA, así como sobre el recientemente anunciado "Protocolo de Reconciliación y Gracia a través de la Separación".
Durante ambas sesiones se trataron asuntos de bajo perfil, con información presentada y sesión para preguntas y respuestas; hubo ocasionales aplausos y se escuchó varias veces el "Amen" cuando Boyette o Fenton destacaban un punto en particular.
En la reunión vespertina Fenton, quien habló primero, dijo que este era un "tiempo de incertidumbre y de esperanza" en La IMU, y detalló la historia de la iglesia que involucra los derechos y la participación de las personas LGBTQ desde la Conferencia General de 1972, cuando la iglesia adoptó por primera vez un lenguaje que abordaba la sexualidad humana.
Agregó que la WCA se formó en 2016 en respuesta al creciente "desafío eclesial" entre las conferencias anuales y las iglesias que involucra a personas LGBTQ, los matrimonios igualitarios y la ordenación de clérigos/as abiertamente homosexuales. La postura oficial de la iglesia, reafirmada en la Conferencia General Especial de 2019, prohíbe el ejercicio ministerial de clérigo/as auto-declarados/as como homosexuales practicantes y el oficio de matrimonios entre personas del mismo sexo. Pero, reconoce el valor humano de todos/as y especifica que La IMU les da la bienvenida en sus iglesias.
Fenton dijo que los medios nacionales al informar sobre estas reuniones después de que se anunciara la propuesta de “El Protocolo”, presentan la imagen de que La IMU no abordó la sexualidad hasta hace muy poco. Los medios nacionales también con frecuencia e incorrectamente informaron que “El Protocolo”, anunciado el 3 de enero por negociadores liberales, centristas y progresistas, era un acuerdo de hecho, cuando en realidad es uno de los varios planes de separación que se debatirán en la Conferencia General en mayo de 2020, y nada es oficial hasta que los delegados voten.
Boyette y Fenton dijeron que “El Protocolo” es único porque personas de todo el espectro estaban en la mesa y acordaron respaldar esta propuesta, y recientemente terminaron de redactar la legislación que se presentará en la Conferencia General, enviada a todo su equipo para confirmar la legislación y esperan que la próxima semana se haga público.
Actualmente “El Protocolo” requiere el voto del 20% de los/as delegados/as a la conferencia anual para convocar a una segunda votación, con el fin de abandonar La IMU y unirse a una iglesia tradicionalista afiliada a la WCA. Esta segunda votación requeriría el 57% de aprobación de los/as delegados/as de una conferencia anual. Boyette dijo en ambas reuniones que el plan actual permitiría a las iglesias individuales votar para irse inmediatamente después de la Conferencia General en mayo.
En ambas reuniones también abordaron el tema de cómo se dividirían los bienes de la iglesia, y los oradores hicieron hincapié en que la llamada "cláusula de confianza" ya no estaría vigente, lo que significa que, si una iglesia vota a favor de irse, podría conservar sus activos. Los pasivos por pensiones serían transferidos a la nueva denominación y las iglesias los financiarían a la tasa de aportes actual.
Con respecto al clero y la estructura de la iglesia, un cambio clave sería el límite de 12 años para los/as obispos/as. Los/as superintendentes de distrito serían eliminados/as y reemplazados/as por "presbíteros/as presidentes" y los distritos contarían con no más de 30 iglesias y las conferencias con no más de 500 iglesias. Las iglesias también tendrían un papel más importante en la elección de sus pastores/as en un enfoque que se llama sistema modificado, ya que ningún/a pastor/a tendría una asignación garantizada.
Boyette también criticó a las diversas juntas y al personal administrativo de la iglesia actual, y dijo que la nueva denominación se organizaría como una "iglesia más ágil" pero con gran responsabilidad.
En respuesta a una pregunta, Boyette dijo que la nueva iglesia estará muy comprometida en atraer mujeres y clérigos minoritarios para servir. Así mismo, dijo que el nombre de la nueva denominación aún no se ha determinado, aunque espera que "Metodista" sea parte del nuevo nombre, que se determinará antes de que la Conferencia General se reúna en mayo.
* Este material fue producido por la Conferencia Anual de Kentucky. Para ver el articulo original abra el enlace aquí.
** Leonor Yanez es traductora independiente. Puede escribirle a IMU_Hispana-Latina @umcom.org. Para leer más noticias metodistas unidas, ideas e inspiración para el ministerio suscríbase gratis al UMCOMtigo.
